Camino de letras

  L uz de estrellas, que se posa sobre unos pobres enamorados de la música. Una luz tan amarga, como la música que escuchamos. Luz; maravillosa y frágil a la mirada. Momento completamente eterno, a la luz de las estrellas.   Cecilio López Acuyo  

Te has ido T ú ya te has ido y me has dejado este vacío tan grande. Al recordar esos días, noches, horas, minutos que pasé contigo me salen lágrimas de felicidad y a la vez de tristeza. Porque te has ido. Nadie va a reemplazar tu sitio y nadie va a saber ser como tú. Has sido único  y siempre lo serás aunque no a mi lado, lo serás en el cielo. Chaima El Onsri, 2º ESO Imagen: Agnes Cecile

Y el hombre de la guerra se tiró al suelo, se hizo el muerto, dejó de respirar y sobrevivió al ataque enemigo. Pero cuán era su suerte, que al levantar su esternón del suelo, la mina de abajo explotó.   Cecilio López Acuyo

RUMBO PERDIDO Diccionario dolorido, Niños consentidos, Aire con palabras De neuronas con alas. Mundo sentimental  Escondido bajo umbral, De escombros De un mundo perdido. Fernando de la Calle

  Algo que decirte  Tengo algo que decir, Es algo muy profundo: Amarte querría sin fin  Mientras gira el mundo. Odio tener que esperar, Tendría que decírtelo, Es algo especial, Rogaría por ello. Esperar más no quiero. Seguro, mi amor, no te quiero. Así que te amo; yo sin ti muero. Juan Sánchez Aguilera

Adi ó s bello pueblo, y a tus majestuosos lares.   Adi ó s bello pueblo, y a tu tez blanquecina.   Adi ó s bello pueblo, porque bello eres.   Adiós bello pueblo… te recordaré siempre.     Adi ó s bello pueblo, que tus calles llaman a los dioses. Adi ó s bello pueblo, que tu cielo esconde mis musas. Adi ó s bello pueblo, que tu alma rinde al desenfreno. Adi ó s bello pueblo, que tú anhelas el recuerdo.   Adios bello pueblo, testigo de batallas imborrables. Adios bello pueblo, defensor del sosiego. Adios bello pueblo, mi ser te llama. Porque a bellas apariencias… se las reclama. Cecilio López Acuyo 

I Paz siento cuando miro el mar, Paz siento cuando veo su azul, Paz siento cuando miro las estrellas, Paz siento cuando miro a mi alrededor. Adelina y Raluca Andronache 2º ESO-D II U na paloma blanca volando sobre el cielo azul con motivo de la paz, tantas guerras cambiaría por armas para poder enseñar que esta vida  no se vive de dolor, hay que saber levantarse y no mirar hacia atrás. Eva Mª Antequera 2º ESO-D III L a historia no cambiará, así quedara.  No cambiará por política ni por física. No cambiará por conquistas ni por idealistas. Cambiará por amor, no por temor. No hay que mirar raza, sino mirarnos a la cara. No importa el dolor, solo importa el amor. Somos iguales en esta tierra, no debe de haber guerra. Francesca Moss, 2º ESO-D IV D a pena ver a tantos países en guerra, pero hasta en guerra hay niños que ríen y juegan. Tengo fe en que algún día eso no será así. Todo cambiará, también pienso que será difícil. Algún

I La paz es no violencia, la paz es no a las guerras porque somos más felices sin ellas. La paz es querer, la paz es amor por eso la tengo en mi corazón. Manel Zobiri, 2º ESO-A II Q uiero una paz para parar el odio y las guerras. Vivir con amor y paz es un deseo que todo el mundo querrá. Quiero una paz, una paz como las palomas blancas manifestarán. Quiero una paz, una paz para que todos los niños vivamos en paz. María Isabel Díaz, 2º ESO-A  III L a paz es amor que siempre está con nosotros, está en nuestro interior. La paz es saber, ¿saber qué? Es saber querer. La paz es no a las guerras, lo pasamos mal, todo es mejor sin ellas. Adrián Rodríguez, 2º ESO-A IV Q uiero preguntarte, ¿dónde estabas cuando había guerra, dónde estabas cuando cayó el estandarte, dónde cuando hay pelea, dónde puedo encontrarte? Quiero tenerte presente, cuando alguien me provoque, quiero tenerte conmigo, quiero tenerte en mi mente. Nos tratamos las pers

O h musa T ú solo házmelo prometer, hazme prometer que si pierdo el hilo de la serenata me aferraré a esta oda, la recitaré, respiraré, y seguiré con mi composición... Oh ser, bestia a la que llamo musa... Que tus gráciles manos de princesa se posen sobre mi alma, para que esta pueda encontrar su propio camino. Oh, dulce cantora, que llamas a la belleza con grácil gesto... Fluye, fluye por mi mente, y hazme sentir el ritmo de la comparsa, en este momento, exacto y preciso... Cecilio López Acuyo  Imagen: Illustration for Edgar Allan Poe’s “Alone”, Edmund Dulac, 1915

I       E n algunas ocasiones me siento un poco sola y lloro, pero a los humanos de ahí abajo parece gustarles. Según me han contado los halcones, esperan ansiosos mi llanto, por algo de que las plantas crecen. Desde aquí arriba he visto a mujeres bailando para que caigan mis lágrimas, pero a otros no les gusta demasiado y se tapan la cabeza. Otros solo me observan, y hay quien canta, lo único que sé es que cuando lloro toda cambia ahí abajo, me gustaría saber el por qué. Mientras descubro la forma de bajar, seguiré llorando. Cristina Piñero, 2º ESO-A II        H ace tiempo que estoy muerto, dos años. No puedo ver ni oír ni hablar ni tampoco respirar, pero sí puedo pensar. No me había dado cuenta de lo buena que era mi vida, ni de la suerte que tenía de la gente con la que la compartía hasta este momento. Ahora me doy cuenta de que debí haber hecho el viaje con ella, pero no lo hice, y ahora ya no puedo hacer nada, no puedo cambiar el pasado. H